Comencé una loca carrera, por un largo u angosto camino,
luchando codo a codo con muchos carreristas, por fin llegué al
final de la carrera, fui el ¡ganador!, estaba muy feliz, pero debía
seguir luchando para mantener el lugar, yo estaba ahí aferrado
con todas mis fuerzas pero un día, escuche que yo ¡no debería!
existir, tenia que desaparecer, la que decía eso era mi madre,
eso fue muy triste para mi, porque yo me aferre a ella esperando
recibir sus cuidados y su cariño, pero ella me rechazaba y solo
me daba sufrimiento y dolor, yo estaba acurrucado muy encogido
a mi propio cuerpo, casi no me movía para no molestarla, me
escondía y camuflaba haciéndole el quite ha los golpes, mamá
se golpeaba el vientre, diciéndome, como pudiste hacerme esto
te quedaste dentro de mi echándome ha perder la vida, tu eres
el culpable de mi desgracia.
Yo estaba muy asustado, no quería dejar de existir pero
tampoco quería que mi madre sufriera, ella empezó una guerra
contra mí, no se alimentaba, apretó tanto su vientre que yo casi
no podía moverme, ella me odiaba y yo la amaba bebió de todo lo
que encontró imaginando dañarme , eliminarme, yo aguantaba el
hambre, no bebía lo que me dañaría, se introducía muchas cosas
raras para matarme, pero yo me defendía ocultándome lo más
que podía, cada ves que se introducía objetos, se ería el útero,
sangraba mucho cuando ella pensaba que yo estaba muriendo y
que era mi sangre la que se derramaba, yo me alimentaba de esa
sangre para que a ella no le hiciera daño, fueron muchos,
bombardeos los que recibí pero resistí, sobrevivi ha todos, por
fin mamá se cansó de luchar contra mí, me dejo en paz, seguí
creciendo muy lentamente, después de tanta lucha estaba muy
débil, soltó su vientre pero yo ya no tenia fuerzas para moverme,
se me hizo muy largo el tiempo de gestación, lo único que,
deseaba, era salir al mundo, desde adentro oía voces de niños
felices, yo pensaba afuera debe ser mejor, ahí no trataran de
matarme ha cada instante, yo solo ¡quería vivir!.
Por fin llegó el día tan esperado, empecé ha moverme, quería
encontrar la salida, ahí esta muy estrecho, todo mi cuerpo me
dolía, ¡ que contradictorio! hace unos meses ella lo único que
quería era eliminarme de su vientre y ahora que yo quiero salir
ella no quiere dejarme salir, no le daré en el gusto saldré de aquí
como sea ¡ aquí voy arrasé con todo!! lo que encontré en mi
camino, por fin estaba ha fuera, muchas manos suaves me
tocaban, todos estaban contentos de verme, valla, tal vez debí
salir antes, ya no tenía miedo, habían muchos que me protegían.
Me llevaban hacia mi madre ¡ No No! ella me matará, lloré
tan fuerte que pesaron que estaba enfermo, nadie pudo
entenderme, ella me tomaba en brazos, yo me escurría como
agua entre sus manos, quiso ponerme en el pecho pero yo la
rechacé, cerré mi boca para no tomar el pezón que ella me
ofrecía que asco, no quiero alimentarme de ella, siempre trató
de envenenarme, lloré tanto que de pronto apareció una
enfermera que me tomo suavemente entre sus brazos me
ofreció un biberón.
Mamá lloraba mucho, nunca supe porqué. Acaso lloraba
de alegría porque yo había abandonado su vientre, o por que
yo la rechazaba.....